Andy Hamilton. Silvershine.

Nacido en 1918, en Port Maria en Jamaica, su primer contacto con la música fue a través de la iglesia y un piano de la familia. Gracias a las emisiones de radio que llegaban de los EE.UU. Andy escuchó la música original de lo que se conoce como la Era del Jazz en los años veinte.
Construyó su primer saxo con bambú y, junto a sus jóvenes amigos, formó su primera banda, Silvershine, en 1928.
Sus primeras experiencias con el saxo fueron con un instrumento alquilado. En 1940, Errol Flynn le escuchó a su banda que actuaba en el exclusivo Hotel Titchfield en Port Antonio y le contrató para tocar su famoso yate Zaka. En 1948. Andy compuso para Flynn una canción llamada Calypso Jazz Silvershine.
En 1949, Andy, como muchos otros, salió de Jamaica y se embarcó para Inglaterra, con la intención de hacer algo de dinero e ir a los EE.UU., donde sus héroes, Ellington, Basie, Webster y Lester Young, estaban disfrutando de la edad de oro del jazz. No llegó más allá de Birmingham donde se le niega la oportunidad de tocar en clubes locales. Forma allí su propia banda, The Blue Notes, con la que se dedica a tocar en funciones cívicas.

En 1985, Andy Hamilton fue trasladado al hospital en un coma diabético y no se esperaba que sobreviviera. En ese estado, sorprendentemente, la melodía de Silvershine, una canción que no había tocado ni recordado en casi 40 años, vino a él y lo sacó del coma.
En 1993, con 75 años, Andy grabó su primer disco, que fue considerado el mejor álbum de jazz del año. Su título, claro está, Silvershine.
 A sus 90 años, Andy Hamilton sigue tocando y participando en proyectos comunitarios y educativos.


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